En esta ocasión os cuento el final del proceso del tatuaje de Marido. Las cuatro horas han sido bastante más duras para él que en la primera parte. Esta vez era terminar el sombreado y el coloreado de las flores. Ha merecido la pena, porque el resultado es una pasada, papi está feliz con su tatu y Nora ya ha elegido flor, le encanta el «dibujo de la pierna de papá».

Esta vez, reportaje fotográfico «detalle», para no ser repetitiva 🙂

Los botes de tinta
Los botes de tinta

 

Los pigmentos que utilizó Jos en el tatuaje
Los pigmentos que utilizó Jos en el tatuaje. Los fija con vaselina al papel de aluminio para que no se muevan cuando carga la tinta.
El cabezal de sombreado tiene cuatro agujas
El cabezal de sombreado tiene cuatro agujas

 

Pedal de la pistola de tatuar. Me recuerda a una máquina de coser-
Pedal de la pistola de tatuar. Me recuerda a una máquina de coser.
El señor José de Juanas tatuando. Una ola por la obra de arte :)
El señor José de Juanas tatuando. Una ola por la obra de arte 🙂
Un aplauso por los cojoncetes que le ha echado marido
Un aplauso por los cojoncetes que le ha echado marido

Vídeo para que veáis cómo se sombrea, me chifla verlo, si dibujase bien me encantaría trabajar tatuando 🙂 Y de paso recuerdazo para marido.

 

Papi sufriendo un poquito
Papi sufriendo un poquito

Y este es el resultado de las ocho horitas de dolor por un lado y trabajo por otro. Todavía sangraba un poquito y se ve la sangre en las aletas, pero Marido está feliz de la vida y creo que el señor tatuador se quedó contentón con el resultado. En cuanto a mí, para qué mentir, a mí me encanta tener a mi maromo tatuado 🙂 .

Resultado final. El color se suavizará después de la cicatrización y se verá en un negro menos intenso.
Resultado final. El color se suavizará después de la cicatrización y se verá en un negro menos intenso.

Que tengáis una semana genial 🙂 Besetes